sábado, 4 de mayo de 2013

Encuentro 1


U.N.Q. Dirección de Tutorías
Nombre del curso:
“Curso de capacitación de tutorías y orientación vocacional: Orientando a Orientadores”
Encuentro Virtual Número 1
Fecha:
     4 de mayo de 2013.-
Profesor:
Silvina Ana Santin


Tema:
Los enfoques.
Los  roles del tutor. Ejes conceptuales y tareas del tutor.
El tutor en el acompañamiento a las trayectorias escolares. El tutor colaborador con el equipo docente de un grupo. El tutor colaborador con la función tutora en la escuela.
Bibliografía:
-Patricia Viel “Gestión de la tutoría escolar” Capítulo1, 2 Noveduc., Bs. As. 2009.
-Satulovsky y Silvina Theuler “Tutorías un modelo para armar y desarmar”.Cap. 6., Noveduc, Bs. As. 2009

/  Objetivos del encuentro:

-Brindar herramientas conceptuales para una definición del rol tutorial.

/  Presentación:

Bienvenidos y bienvenidas al curso de capacitación en tutorías y orientación vocacional: Orientando a Orientadores” ….!

En este encuentro encontrarán un recorrido sobre los materiales de lectura que les proponemos trabajar para abordar la cuestión de cómo gestionar un proyecto de tutoría en la escuela.
“No es ni un decálogo ni una receta” acerca de los modos en que creemos que se puede desarrollar esta tarea, puesto que la misma es siempre impredecible, novedosa, ambigua, aunque también puede resultar confusa, vaga y conflictiva en los contextos institucionales en los que trabajamos, pero no por eso es “(im)posible” planificarla y finalmente ejecutarla.

/  Introducción:

Nos proponemos compartir con ustedes algunas de nuestras preocupaciones sobre cómo se vinculan nuestros alumnos con la escuela, la temática del abandono, la situación de los alumnos frente al estudio y frente al propio deseo o no de seguir estudiando.

Entendemos que hoy resulta imposible separar el mundo de la vida del mundo de la escuela.  Pero  es probable que en las condiciones que se produce la enseñanza hoy  surjan tensiones entre la integración de los adolescentes a su “grupo de iguales”, su relación con el grupo de docentes y su integración a las normas escolares y universitarias. Cuando la distancia entre la cultura social incorporada por los jóvenes y la cultura escolar-curricular es grande, el conflicto es un fenómeno muy probable en la experiencia escolar.

Esta constituirá la problemática básica a abordar, desde el curso de tutorías y orientación vocacional, ya que creemos forma parte de un conjunto de estrategias que pueden utilizar los docentes tendientes a lograr cambios significativos en torno a pensar la posibilidad de un proyecto de vida de los jóvenes que supere las visiones inmediatistas.

En estos encuentros, intentaremos por un lado instalar la preocupación sobre la generación de proyectos de vida y orientación vocacional en las escuelas medias y por otro lado, brindar competencias específicas e introductorias para el desarrollo profesional en esta área.

Bueno si me siguen, aquí vamos…!

/  Desarrollo:

Los Enfoques
Se pueden estructurar en la escuela tres tipos de acciones tutoriales, dependiendo de:
*La actitud de los alumnos:
- Concepción pasiva: exige la imposición exterior de normas,  suprimiendo cualquier efecto indeseado,  estimulando a las formas apropiadas de conducta.
- Concepción laissez-faire: básicamente el rol de tutor como orientador o guía no existe, el tutor deja que los chicos hagan.
- Concepción activa: el autodesarrollo debe ser acompañado con el acuerdo de ciertas reglas de convivencia interna básicas, diseñadas mediante la guía de un adulto.
*En relación con la actitud del docente encontramos dos enfoques del trabajo de Tutoría:
-Reactivo, se trabajar sobre el emergente, sobre el problema.
-Proactivo, es el que propone nuevas actividades, promueve el surgimiento de espacios para estrategias.  Este se realiza mediante una escucha preventiva, de anticipación.
*Por último en relación con el ámbito de acción podemos determinar un:
-Ámbito psicosocial: refiere a la relación que el tutor tiene con cada alumno en el plano individual, esto es la historia previa del alumno, y la posibilidad que tiene el tutor de estructurar el propio conocimiento de si mismo.
-Ámbito sociodinámico: refiere a la relación entre el tutor y el grupo. Supone un conocimiento de las dinámicas internas de los grupos de aprendizaje de acuerdo a los cambios que se producen en las trayectorias escolares.
-Ámbito curricular-institucional: refiere a la identificación de prioridades pedagógicas, la dinámica y el seguimiento de procesos de aprendizaje coordinados específicamente.


Por este tema consultar  Capítulo 2 Patricia Viel “Gestión de la tutoría escolar “ Noveduc., Bs. As. 2009.

 
 





Los  roles del tutor. Ejes conceptuales y tareas del tutor.
La designación de la figura del tutor responde a la intención de personalizar y dar sistematicidad a los procesos educativos.
Algunos aspectos de la función docente reclaman de modo particular la acción específicamente tutorial: no sólo la coordinación del proceso evaluador de los alumnos, sino principalmente la adecuación de la oferta educativa a sus necesidades para proceder a las oportunas adaptaciones curriculares y, en general, a la detección y atención de las necesidades de apoyo de algunos alumnos en determinados momentos de su escolarización o a lo largo de toda ella. El tutor además, como un adulto, está llamado a funciones mediadoras en las relaciones dentro del espacio educativo, así como también en las relaciones con las familias de los alumnos y con el entorno.



Por el tema de la responsabilidad de los adultos consultar Cap. 1 de Gestión de la tutoría escolar de Patricia Viel Noveduc., 2009.
 




Siguiendo las palabras de Débora Kantor, se constituye referente para el abordaje de los problemas. Un espacio desde el cual optimizar la acción de las personas y dispositivos institucionales disponibles, y generar nuevas alternativas cuando sea necesario y posible.[1]
Constituirse como referente implicará ser reconocido como un adulto con autoridad y con posibilidades de orientar, guiar, ayudar a”otros”.
De acuerdo a lo que diversos autores plantean la definición del rol del tutor dependerá en principio de la construcción imaginaria que cada quien haga de su propio lugar, pero también se encuentra en intima dependencia de las intersecciones de ese rol con otros roles adultos en la escuela y de la definición que de ese rol realicen los demás actores.
Es de enorme importancia destacar que el tutor forma parte de un equipo docente.  Resulta más que evidente que es necesaria la conformación de un colectivo que sostenga las acciones y donde se represente un ámbito  de discusión y consenso. “Un equipo confiable que desarrolla un marco donde revisar y dimensionar las prácticas, para pensar que fue valioso y que mecanismos se pusieron en juego para que el proyecto resultara significativo, que cuestiones no aparecieron con la claridad necesaria y adoptar nuevas líneas de definición e implementación”[2].
Las funciones y tareas generales que se encomiendan al tutor tienen tres diferentes tipos de destinatarios: ante todo, el alumnado, pero también el profesorado y las familias.
Hemos discurrido acerca de la acción tutorial sobre el alumnado y en breve nos referiremos sobre la acción hacia el propio profesorado, pero en este caso haremos una referencia a la relación con las familias. Al decir de algunos autores, el encuentro con las familias se articula mediante un tiempo/espacio, como analizador en el dispositivo institucional (Fernández L, 1998:34).



 
 





Abrir el espacio/tiempo de la posibilidad que las familias se comprometan con el propio proyecto de la escuela, creando condiciones para el disenso, la crítica y la construcción conjunta no es un tema menor.
Todas esas funciones, a su vez, pueden desarrollarse en diferentes tipos de actividades.  El acierto en la elección de esas actividades dependerá de su adecuación a las circunstancias reales de los alumnos y del medio institucional en que se desarrolla la función tutorial en la escuela.
Las funciones podrán desarrollarse atendiendo a distintas actividades, y es responsabilidad del tutor elegir, programar y realizar las actividades que le parezcan más oportunas para sus alumnos, de acuerdo a un tiempo y lugar.
Es preciso que el tutor planifique las actividades específicamente que va a desarrollar a lo largo del curso. Esa planificación ha de plasmarse en una programación semejante a otras programaciones docentes: con libertad y bajo su responsabilidad, pero en el marco de un Proyecto coordinado.
La responsabilidad de programar la acción tutorial ha de hacerse en el marco de objetivos educativos comunes. Ello supone no sólo que su trabajo sea reconocido, apoyado e incentivado, sino también que toda la comunidad educativa participe en la concreción del modelo de acción tutorial y se implique en su desarrollo con diferentes niveles de responsabilidad. Con ello, el tutor no estará solo en su tarea, e integrará sus acciones en un tratamiento educativo más amplio donde obtiene respaldo institucional y, en consecuencia, puede alcanzar mayor eficacia.
El tutor y  el equipo docente:
El trabajo tutorial en equipos de estudiantes, se encuentra de la mano con otra acción que está vinculada con la acción del equipo desde la docencia.
El espacio tutorial debería propiciar espacios donde intercambiar formas de trabajo, problemas y soluciones encontradas, materiales utilizados, evaluaciones sobre la marcha de los cursos, etc., con el mismo equipo docente. Para ello se pueden establecer foros o listas de correo y encuentros presenciales periódicos. Una forma particular de vinculación resulta ser el aula de tutoría, en la que los tutores de un mismo curso o de otros cursos, y los equipos docentes trabajan atendiendo las demandas de sus grupos, a través de la web y el uso de la computadora.
De dichos intercambios formales y no formales o informales, se pueden resolver colectivamente algunos de los problemas comunes que se van presentando en la vida del aula.
Estos espacios resultan además de utilidad para la formación es servicio, para el desarrollo de actividades específicas de formación complementaria (uso de herramientas específicas para el trabajo distancia, manejo de nuevas tecnologías, etc).
El tutor y las trayectorias escolares: En virtud de las condiciones en que se desarrolla la escolaridad, la función del tutor se requiere pensar como parte de los proyectos institucionales que las escuelas diseñan para fortalecer las trayectorias escolares de los estudiantes, favoreciendo la reinserción escolar, la promoción de la terminalidad, y la constitución del espacio escolar como un lugar de aprendizaje continuo a lo largo de la vida. Esto es para que la escuela obligatoria no constituya para la mayoría de los alumnos al el último escalón de sus procesos de aprendizajes.
La función de tutoría en este marco se desarrolla alrededor de la tensión entre la atención colectiva de los estudiantes y los requerimientos de atención individualizada, demanda continua realizada al tutor. En concordancia con lo señalado, esta propuesta parte de revisar conceptos que se consideran fundantes, tales como el derecho a la educación, la concepción de los adolescentes, jóvenes y adultos como sujetos de derecho; el lugar de la escuela y de los agentes estatales como garantes del derecho a la educación; el acercamiento de las culturas juveniles a las culturas de los adultos, la importancia del trabajo como resultado del propio esfuerzo, etc.
El tutor en la escuela: Por ultimo las tutorías sirven a la escuela, a los fines de establecer una comunicación fluida entre los diferentes estamentos y grupos, tanto formales como informales.
En este sentido resuelve problemas, mejora las relaciones interpersonales, contribuyendo a la conformación de verdaderos equipos docentes. Para todo esto es necesario que la escuela piense en relación a la tutoría formulando criterios consensuados.

Estado de situación de la Tutoría: problemas no resueltos
Hoy la tarea de tutoría supone una actividad más que está asociada a la dedicación exclusiva de los docentes en la escuela.  Esta cuestión contribuye al compromiso de los actores con los objetivos de la institución. Pero muchas veces observamos que en relación con los problemas que presentan los estudiantes se desarrollan acciones tutoriales de forma asistemática, o "funcional". Por otra parte, que los docentes tutores tengan a su cargo las decisiones y acciones necesarias para el desarrollo tanto del propio espacio tutorial, como de la articulación de criterios y actividades con otros espacios tutoriales, puede que no  contribuya la unidad de sentido que se requiere en todo programa institucional de tutoría.
Otra cuestión que dificulta el desarrollo de una visión es que los tutores constantemente reinterpretan los objetivos perseguidos, hacen apreciaciones de las situaciones enfrentadas, estructuran problemas, generan alternativas y redefinen las prioridades fijadas en los objetivos propuestos. Estos comportamientos no sólo alteran los cursos de acción definidos por el diseño sino que también modifican el contexto de operación entablando alianzas, fortaleciendo a algunos actores sociales y no a otros, generando expectativas y demandas y creando una imagen  de las acciones del programa, que muchas veces no coincide con las del programa.
Entonces, los resultados alcanzados pueden diferir notablemente de los planteados en los objetivos explícitos, las consecuencias no deseadas escapar al control de los participantes y la incertidumbre sobre los impactos desbordar las capacidades.
Por todo lo planteado lo más conveniente resulta que cualquier acción tutorial, se desprenda de los objetivos del propio proyecto educativo institucional.

/  Propuestas para la lectura:

En relación a las lecturas recomendadas para esta clase encontrarán que el texto de Patricia Viel, de la referencia bibliográfica,  “Proyectos y recursos para la escuela secundaria: Ejes de contenidos y tareas del tutor” nos narra la función de tutoría en la escuela secundaria, como una tarea colaborativa de los docentes, hacia los docentes, la propia institución pero fundamentalmente para los alumnos. “En el contexto contemporáneo, y ante la compleja situación de fragmentación de las escuelas secundarias, la tutoría surge como una estrategia potente que articula recursos para acompañar las trayectorias escolares de los jóvenes.
Una mirada estratégica de la gestión de la tutoría demanda la señalización de posibles caminos para construir sentidos, condiciones y acciones que permitan su desarrollo con una perspectiva institucional. Con fuerte acento en el qué, y el para qué, se proponen variados cómo?, con la convicción de que es posible una escuela diferente.
Este volumen es un aporte para las escuelas que desean integrar el proyecto de tutorías como una línea de mejora a su proyecto institucional y para las que desean revisar las acciones realizadas”.
Entre sus Contenidos, encontramos en la Primera parte, en el capítulo 1: el tema de la responsabilidad de los adultos. Luego abordaremos la “pregunta sobre los sentidos” de la tutoría escolar. Entre los conceptos fundamentales que aborda el Capítulo 2, y pretendemos ustedes analicen se presenta: los sentidos de la tutoría en la escuela secundaria, las dimensiones y los logros, el proyecto del equipo y la coordinación, y finalmente la tutoría como proyecto institucional como una responsabilidad compartida sobre la que volveremos en el módulo 4 de este curso.
En síntesis, esperamos que con esta lectura podamos introducirnos en la temática de la tutoría, el rol del equipo de tutores en la escuela, la tutoría como responsabilidad de la escuela y de las políticas educativas
Por otra parte el texto titulado “Tutorías: un modelo para armar y desarmar”,  nos propone abordar la cuestión de la tutoría en los primeros años de la escuela secundaria, pero no por eso deja de brindar pistas acerca de cómo enfrentar la problemática que pretende desarrollar este curso, la vinculación particular de la tutorías con los alumnos del ultimo año de dicho nivel.
El texto de Silvia Satulovsky y Silvina Theuler recoge “las voces de los actores a través de preguntas, ideas y categorías desplegadas para imaginar un nuevo sujeto joven, que interpela a los adultos mientras padece las formas fragmentadas, estereotipadas y cristalizadas de las instituciones educativas”.
Fracturas, grietas, angustias y un enorme vacío simbólico cuestionan el sentido de las prácticas educativas sin encontrar respuestas desde las lógicas disciplinarias del control y la sanción. Una suerte de darwinismo educativo, en donde sobrevive el más apto y queda afuera el que no puede, carcome gran parte de la matrícula en los primeros años de la escuela media. Este dato no es sólo una proporción fría, son alumnos con nombres, historias y rostros, que quedan fuera de la escuela y del derecho a la educación. Las cifras maquillan el sentimiento de frustración, fracaso y desamparo de los jóvenes y de la escuela toda.
Este libro-experiencia se fue construyendo en espacios de formación con colectivos de escuelas secundarias y medias de diversas localidades argentinas y mexicanas, conformados por supervisores, equipos técnicos, directores, profesores y preceptores que se sintieron desafiados por el ejercicio de la función tutorial.
La lectura solicitada para este encuentro, Capítulo 6, aborda la cuestión del trabajo con las familias y para ello considera en la función tutorial una serie de actividades para poder integrarlas al trabajo colectivo institucional.




[1] Kantor, Débora (2008): "Variaciones para educar adolescentes y jóvenes". Buenos Aires: del Estante Editorial.
[2] Satulovsky y Silvina Theuler “Tutorías un modelo para armar y desarmar”. Pag. 84. Buenos Aires, Noveduc, 2009

/  A modo de disparador.

Este es tutoris  una especie de super tutor, resulta de una ilusión, un imposible…
Qué le sacaríamos y por qué…
  se animan a dibujar el propio?










Espero les haya gustado tanto como a mi, compartir este espacio con ustedes.
Saludos! Silvina



[1] Kantor, Débora (2008): "Variaciones para educar adolescentes y jóvenes". Buenos Aires: del Estante Editorial.
[2] Satulovsky y Silvina Theuler “Tutorías un modelo para armar y desarmar”. Pag. 84. Buenos Aires, Noveduc, 2009

1 comentario:

  1. Estimados,

    Soy Rodrigo Mendez Caldeira, egresado de la casa (Comercio Internacional), trabajo como PAS (Secretaría Administrativa) y también soy tutor hace 3 años y monedas de la UVQ, para la Tecnicatura Universitaria en Ciencias Empresariales y la Lic. en Administración.

    Ingresé a la tutoría sin saber mucho de qué se trataban el trabajo cotidiano y el rol en términos generales. Mi opinión es que es una tarea compleja y, por lo tanto, importantísima.

    Conozco muy poco de la tutoría presencial y menos del vínculo con la educación Media. Por eso estoy aquí, y espero que el intercambio de experiencias sea fructífero para tod@s. Mi opinión en base a mi trabajo en la UVQ es que el rol del tutor es un elemento clave para la retención y la graduación.

    El documento de lectura menciona que, según diversos autores, la definición del rol del tutor dependerá de la construcción imaginaria que cada quien haga de su propio lugar. No podría estar más de acuerdo.

    Ahora bien, siendo una tarea central, pero cuyo rol nunca termina de estar del todo definido, creo yo, enciende una alarma a la que hay que estar atento, máxime cuando contribuye a la graduación.

    Me gustó Tutoris; en mi imaginario, adentro del maletín lleva muchos puentecitos, para tender entre el estudiante, su espacio socio-cultural, la institución y los docentes.

    Saludos!

    Rodrigo

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