lunes, 27 de mayo de 2013

Encuentro 4




U.N.Q.
Dirección de Tutorías
Nombre del curso:
“Curso de capacitación de tutorías y orientación vocacional: Orientando a Orientadores”
Actividad Número 4

Tema:
-                  -Los equipos de tutorías y orientación
Bibliografía:
- Discursos y prácticas en orientación educativa: los equipos técnicos en la escuela, incertidumbre y praxis institucional. Noveduc. Bs. As. (2002).

Objetivos del encuentro:

-                  Discutir sobre el papel y rol de los equipos de tutorías y orientación en las escuelas

Introducción:

Aquí encontrarán un recorrido sobre los materiales de lectura que elegimos para abordar la cuestión de “El rol de los equipos de tutorías y orientación”
Encontrarán que las problemáticas y conflictos que son inherentes a la instalación de dispositivos de tutorías y orientación escolar, no le son ajenas ni desconocidas y que por cierto constituyen un conjunto de cuestiones que todo actor con compromiso en una institución escolar se topa, algún día, en la complejidad de su práctica.
Veremos entonces que el análisis del rol de los equipos de tutorías y orientación escolar supone el dimensionamiento de variables tanto pedagógicas (dificultades asociadas al procesos de Enseñanza y Aprendizaje), como sociales (conflictos de convivencia), subjetivas, institucionales, comunitarias, etc.


Desarrollo:

Nos proponemos compartir con ustedes algunas de nuestras preocupaciones sobre cómo se vinculan las prácticas de tutorías y orientación con los imaginarios, y sentidos atribuidos por los actores a las tareas que desarrollan, situando las mismas en un universo que va desde “lo imposible” hasta la “omnipotencia”.

Encontrarán que las prácticas de orientación educativa se definirán como un “conjunto de prácticas que colaboran, prestando apoyo técnico profesional específico, en el desarrollo de las funciones de las instituciones escolar y que estas acciones están a cargo de profesionales de formaciones disciplinares distintas…”.
Pero así y todo nos pongamos de acuerdo en una definición, existen en la vida de las escuelas distintos dispositivos o nombres para nominar al actividad de orientación.  El nombre “gabinete escolar” es probablemente el que más ha concentrado estas funciones o tareas. Encontrarán que el llamado “gabinete”, ha operado bajo dos modelos:
- Modelo centrado en la práctica educativa, basado en la psicometría (tests mentales) y teorías del aprendizaje  (función de selección/segregación a partir de parámetros de normalidad/anormalidad).
- Modelo Centrado en los casos, basado en la psicometría y en las técnicas proyectivas.
En este sentido podemos distinguir variadas posiciones respecto del desarrollo que adquiere la tarea. La ya presentada Posición tradicional se encuentra centrada en las técnicas y la adaptación del individuo a la norma, que ha sido revisada críticamente en las últimas décadas;  pero a pesar de esto, se sigue poniendo el foco en “el alumno problema”.
Asimismo de dicha definición surgen Malentendidos respecto a la función del “orientador” (el que debe poder encontrar el camino perdido). Algunas humoradas respecto a la ubicación de las personas en el espacio y no respecto al sector del sistema educativo/laboral en que el individuo estaría apto para continuar, que sería la verdadera función del orientador. También existen algunos prejuicios sobre una supuesta “función de espionaje” a docentes, control y selección de alumnos en función de un sistema de producción que requeriría cierta homogenización de conductas que tendrían los orientadores.
Estos malentendidos generan cierto menosprecio respecto a la función del orientador,  “alguien que asesora sobre pero está fuera del aula, y quizás nunca estuvo enfrente de”. Este menosprecio puede hacer fracasar las propuestas/alternativas de intervención.
La Perspectiva Tradicionalista entonces estará fuertemente marcada por los ideales pedagógicos vigentes, en relación con el perfil y la personalidad del alumno.
Por otra parte encontramos la Perspectiva Tecnicista se encuentra basada en el conductismo y los parámetros del método científico, pretende la “neutralidad de los operadores”. Los tests o cuestionarios técnicos son privilegiados como herramientas que tienden a buscar la “eficiencia” según ciertos ideales. Se encuentra en sintonía con el conductismo, y no importan los procesos intermedios sino los resultados.
La Perspectiva Institucional se encuentra descentrada de la atención del caso individual, incluye otras unidades de acción como la institución o la comunidad. Busca despatologizar las intervenciones e implica una mirada crítica del dispositivo como productor de subjetividades (la producción de valor social que conlleva –por ejemplo- la mirada del “alumno problema” no tiene eficacia solamente respecto a la institución , sino que se convierte en un mensaje hacia la sociedad).
Una Perspectiva Integral buscará desarrollar ciertas condiciones para el ejercicio de la práctica de tutoría y orientación: 
-la orientación es una forma de relación con otro u otros sujetos; implica pensar el cómo intervenir sin avasallar los espacios privados e íntimos.
- la orientación implica una toma de posición o postura; diferencia entre postura interviniente y postura interventora.
- la orientación está vinculada a la ternura  (por la similitud a la relación paterno-filial).
-la orientación es escucha y presencia, reciprocidad, receptividad y compromiso.


Si todavía están allí, y algo de lo que venimos hablando les hace cierto “ruido” les propongo que me sigan…!

Propuestas para la lectura:

En relación a las lecturas recomendadas para esta clase encontrarán que el texto  de Daniel Korinfeld “La intervención de los equipos técnicos en la escuelas y el campo de la salud mental”. El objetivo del autor es plantear líneas de análisis para revisar la relación existente entre determinadas prácticas educativas y el campo de la salud mental.
Una cuestión que nos trae como reflexión el texto de Alcira Orcini “ La escuelas del 2000” es sobre los efectos de la globalización y la crisis sociopolítica y el empobrecimiento de nuestro país y los cambios en la escuela.
Al respecto la autora señala “no todas las escuelas son la escuela, sino que cada escuela es como puede…” (pp24)
Para ellos realiza una caracterización entre dos tipos de escuelas: las escuelas del aguante vs escuelas de la resistencia.
Las escuelas del aguante ayudarían a resistir, mientras que las escuelas de la resistencia en ellas si se puede esperar circulación y producción de saberes, desarrollo de vínculos para la convivencia democrática, que resulten ámbitos propicios para la construcción de la salud mental.
Lo que nos ofrece  en relación con ello es una serie de testimonios en lo que se verifica la falta de herramientas conceptuales y metodológicas que se encuentren a la medida de los nuevos escenarios. En este sentido la autora propone que las propuestas de intervención deben focalizar el problema central y localizar las tensiones vinculadas a este problema, facilitando espacios de diálogo entre los protagonistas, activando el funcionamiento de redes y estrategias con alto nivel de generalidad (ejemplos en pag 33).
Así realiza un densa descripción de estos “los nuevos escenarios de práctica pedagógica” que implicarán un alto grado de compromiso emocional.
Se recomienda especialmente recurrir a pp 34 donde se propone lineamientos de trabajo a ser revisados en ámbitos de trabajo y de formación profesional (ver cuadro).
Por otra parte el texto titulado: Álvarez González y Bisquerra Alzina (1996), citado en Korinfeld, describen la multiplicidad de enfoques en orientación. Así distinguen Orientación y Tutoría (modo específico de orientación, realizado por el docente hacia el alumno y al grupo de clase). Sobre la orientación es importante destacar  que se trata de un proceso no-lineal (pp 15) y que como tal es necesario prestarle atención a los procesos histórico económico, políticos y culturales ya que ha sido y es un espacio de disputa social, que conlleva resistencias de distinto orden.
El texto de Norberto Daniel Ianni  “La orientación escolar en tiempos de incertidumbre, “ nos plantea las condiciones esénciales para que se pueda dar este proceso complejo llamado “orientación” en la escuela en estos tiempos. Dicho texto data del año 2002, contexto de profundización de la crisis del neoliberalismo.
Realiza una Definición de orientación. Orientar es colocar una cosa en posición respecto a determinadas coordenadas. La persona que está des-orientada desconoce sus coordenadas porque entonces orientar es acompañar a la persona para que re-conozca sus coordenadas. El orientador acompaña para encontrar las coordenadas de la situación, el problema o el conflicto (solo ubica); el orientado (persona o grupo) es quien decide que orientación tomar.
Por ello es importante por un lado reconocer los rasgos específicos de las instituciones educativas (ver pp- 56): la permeabilidad y la singularidad (cada situación debe ser analizada particularmente, las respuestas no pueden ser únicas, estandarizadas o a priori).
Por otro lado,  la orientación es una forma de relación con otro u otros sujetos; implica pensar el cómo intervenir sin avasallar los espacios privados e íntimos.

Por último el texto de Carina Rattero, “En mi escuela pasan cosas raras”, nos habla de lo específico del sufrimiento contemporáneo, que es la incertidumbre, la inseguridad, la desprotección (pp 62), pero lo específico de nuestra época es la inexistencia de instituciones que puedan hacer algo con ese sufrimiento.
Pero ante la pregunta, “Quién te forma para esto?” la autora pretende abordar que el ritmo que toman los acontecimientos es algo que no se puede prever, es algo que inunda y desborda; nadie sabe que hacer cuando la realidad irrumpe; las “autoridades” no pueden ofrecer las respuestas necesarias.
Se trata entonces de construir un dispositivo de trabajo institucional que haga un paréntesis en la aceleración. “Construir islotes habitables que no sean inundables por el océano mercantil” (pp65). 

Espero que a estas alturas estén dispuestos a seguir acompañándonos hasta el final de este recorrido. Les auguro mayores interrogantes, más que respuestas...
Propuesta de trabajo
El WIKI, una herramienta para el trabajo colaborativo
Las redes informáticas permiten compartir ideas y una gran cantidad de información que pueden ser relevantes en el desarrollo de nuestra profesión. Por otra parte, la labor que se realiza en diferentes centros da lugar a recursos, materiales o documentos que pueden ser de interés profesional. En este sentido, el artículo “El Wiki de la orientación y el asesoramiento vocacional” (Jesús Sanz, Manuel Gil Beltrán y Andrés Marzal; 2007) describe cómo la utilización de las tecnologías de la información y comunicación, en manos de orientadores y asesores vocacionales que colaboran activamente, añadiendo y editando contenidos, abre nuevas expectativas y posibilidades para el desarrollo profesional en esta u otras áreas.
Está aceptado que los trabajos colaborativos suelen ser más productivos que los trabajos individuales, y desde la implementación de la llamada Internet 2.0 comenzaron a desarrollarse diversas aplicaciones destinadas a:

        Ayudar que dos personas o más trabajen juntas
        Compartir conocimientos y experiencias
        Automatizar actividades
        Crear una memoria de la organización
        Aunar geografía y tiempo.
Este último punto, aunar geografía y tiempo, parece ser un detalle crítico a la hora de implementar algún sistema de trabajo colaborativo en nuestros tiempos de “multiactividad”. Aunque “la red” aportó desde un principio una serie de aplicaciones útiles para el trabajo en colaboración (como el correo electrónico o el Chat), se hacía necesaria la creación de una herramienta que permitiera desarrollar en la Web un espacio donde coordinar proyectos compartidos, compartir y desarrollar materiales de trabajo e investigación, etc.
En un principio, la herramienta destinada a estas funciones fue el correo electrónico, que si bien permite mover la información de un lugar a otro, no permite llevar un “control de cambios”, y su llegada está limitada a una lista de usuarios, que con la proliferación de correos, pueden perder la noción de cuál es la última versión del documento compartido.
La herramienta que vendría a solucionar estos problemas es la llamada WIKI. Sus  principales ventajas son quepermitir, en un espacio común (virtual), que una persona A pueda desarrollar un tema y una persona B pueda corregirlo o ampliarlo, desde el lugar en que se encuentren y en el momento que tengan disponible. Gracias a su carácter de “hipertextual”, es extensible indeterminadamente y, si se consigue un buen volumen de participantes, este medio permitiría desarrollar documentos muy completos. Como desventaja de este entorno, se puede decir que su buena estructura depende del “criterio de usuario”. Es decir, un usuario malintencionado podría introducir informaciones erróneas (por eso no es aceptado Wikipedia, que funciona bajo esta lógica, como fuente para trabajos académicos); pero también, sobre todo si la comunidad de usuarios es amplia, existen los usuarios bienintencionados que se encargarían de corregir o eliminar las intervenciones maliciosas.
A continuación, un video descargado de youtube que explica el funcionamiento de este herramienta, y la dirección de un Wiki que creamos para que puedan explorar un poco sus posibilidades.
Entonces…. les proponemos entrar al Wiki, ir al “botón” “Easy edit” y ver si pueden modificar el contenido (que es este mismo escrito), la tipografía, etc. Luego pueden ir a la página inicial del Wiki (www.wetpaint.com) y ver si pueden crear su propia plataforma, es muy sencillo.
También pueden navegar un poco por la Net buscando otras plataformas y analizando que alternativas ofrecen. Si surgen cuestiones interesantes o dificultades, podemos trabajarlas a través de los comments (comentarios) del blog.

martes, 21 de mayo de 2013

Encuentro 3



Nombre del curso:
 “Curso de capacitación de tutorías y orientación vocacional: Orientando a Orientadores”
U.N.Q.
Dirección de Tutorías
Encuentro Virtual Número 3
Fecha:
      22 de Mayo de 2013.-
Profesor:
Arias Yamila, Capel Gabriela, Mastrovincenzo Paola y Rodriguez María Laura








Tema:
-                  Recursos en Orientación Vocacional
Bibliografía:
 Ezequiel Ander Egg y María Josè Aguilar Idañez, “Cómo elaborar un proyecto”, Lumen Himanitas, BuenosAires 1996.

 

Objetivo del encuentro:

-                  Conformar la fundamentación, los objetivos y un plan de acción sobre un proyecto de acción tutorial.


 Introducción:

En esta ocasión, ya habiendo abordado en profundidad la temática de la Tutoría y Orientación Vocacional en nuestros tres encuentros presenciales, quisiéramos proponerles a ustedes intentar articular la unidad I con las unidades II y III ya trabajadas.
En esta actividad comenzaremos con la identificación de un problema y la definición del mismo. En esta ahondaremos en la búsqueda de información, identificación de la solución, predicción de las consecuencias, y previsión de los resultados a los fines de pensar y llevar a cabo la fundamentación de un proyecto de tutorías y orientación.
Partiendo del armado de esta fundamentación del proyecto, les propondremos a continuación pensar algunas estrategias para utilizar en el diseño del mismo. Pensando en acciones que tengan que ver con tutorías y orientación, planificadas desde los 4 momentos que les propusimos en la clase presencial 2, para llevar a cabo un taller.
Para la presente actividad tendremos que pensar en un plan de trabajo. Este hará referencia a los objetivos que pretendemos lograr con este proyecto, las metas, y las estrategias de cómo lo llevaremos a cabo. En este punto enfocaremos la actividad pensando en que técnicas  y actividades utilizarían, con qué recursos, cómo armarían los grupos de alumnos para formular el plan de acción.
La idea es orientarlos y asesorarlos sobre qué cosas debe tener en cuenta al momento de armar cada uno de los 4  momentos del taller, con la intención de poder instrumentar de forma efectiva los recursos que poseen.

Desarrollo:

Para la concreción del proyecto, tendremos en primer lugar que esclarecer cuales son nuestros objetivos y metas a cumplir para dicho taller. Para esto deberían preguntarse ¿para qué se lleva a cabo dicho proyecto? y ¿cuánto quisieran alcanzar con el mismo? Estas preguntas son disparadores que permiten formular un plan de manera organizada y sistematizada.
Cuando se logra responder la primera pregunta estaremos pensando en los objetivos que indicarán el destino de nuestro proyecto. Ya que estos conforman el elemento fundamental de lo que se quiere alcanzar. Es importante diferenciar estos con la finalidad, ya que “los objetivos serán los efectos del proyecto (lo que se espera alcanzar) y lo que será el posible impacto del mismo (es decir a quién contribuirá el proyecto si se desarrolla con éxito)”[1]
Por otro lado la segunda pregunta que les mencionamos anteriormente, nos permitirá establecer las metas que de manera articulada a los objetivos, intentan establecer tiempo, espacio y ámbito determinado. Dicho de otra manera las metas operacionalizan los objetivos, estableciendo cuánto, cuándo y dónde se realizarán estos.
Finalmente teniendo en claro esto podemos pensar en planificar estrategias para nuestro proyecto. Para comenzar tenemos que  evaluar en primer lugar con quiénes trabajaremos y dónde, a fin de poder establecer la forma que pretendemos concretar  las actividades. Así podremos pensar en un procedimiento con técnicas eficaces.
Una de las maneras de elegir adecuadamente las estrategias y técnicas para la implementación de un proyecto es dar preferencia a aquellas que facilitan, promueven o posibilitan la participación de la gente en el desarrollo del proyecto.
Desde “el punto de vista metodológico, hay que establecer los mecanismos de inserción e implicación de los beneficiaros en la realización del proyecto”[2]. En este caso, para trabajar con los jóvenes que requieren orientación es fundamental tener en cuenta la participación de ellos y brindarles la importancia que ellos tienen en este proyecto. De esta manera no solo los hacemos participes sino responsables también durante el mismo.
Finalmente, una vez establecidos los objetivos y la meta de nuestro proyecto, el paso a seguir para una adecuada elección de nuestras estrategias es hacer un diagnóstico adecuado de las personas con quienes trabajaremos en relación a sus necesidades. De esta manera nos aseguraremos la eficacia y los logros planificados en nuestro proyecto. “Cuando nos referimos a estrategia es a una síntesis interactiva entre el ver, el pensar y el actuar sobre las situaciones que son objeto de la consulta” [3].
Este primer diagnóstico nos permite obtener información general y consideraciones importantes para formular las características estructurales de los talleres que se pretenden llevar a cabo y las distintas técnicas.
Para ampliar todos estos temas, sugerimos ahondar en la bibliografía citada.

Propuesta de trabajo

Les propongo realizar esta actividad que se denomina “Decisiones y soluciones a problemas”.
La misma no es para que traigan lista para el encuentro que viene, ni mucho menos, si no que tiene como fin brindar una serie de ideas y elementos que sigan una línea que los conduzca a la realización del trabajo final.
Para esto disponen todo el tiempo que queda de realización que con lleva la trayectoria de este curso.
Por ello los capacitadotes nos ponemos a su disposición para que puedan evacuar sus dudas y efectuar las consultas que crean convenientes.

  1. Definir el problema o decisión a tomar.
En primer lugar determinar si precisa una definición o solución (si no hay problema no hay falla). A continuación, identificar claramente  la situación o problema, preguntándose: ¿qué evidencia hay para demostrar que existe tal o cual problema o decisión a tomar?
Es el problema un síntoma de un asunto de mayor importancia, si es así, ¿cuál es la verdadera cuestión?, qué objetivo conseguirá si se soluciona el problema o si toma esta decisión?
Escriba o narre su proceso de definición del problema o decisión a tomar, en pocas carillas.
  1. Buscando información:
Puede obtener información de la realidad sobre la situación descripta basándose en fuentes fiables (documentos, actas, estadísticas, investigaciones antecedentes), si no la tiene puede suponerla consultando a expertos, en libros, etc. Sin embargo a veces tanta información, nos marea y por ver el árbol nos perdemos el bosque o viceversa. Entonces sólo releve la que es sustancial al problema descrito.
Escriba o narre este proceso en pocas carillas.
  1. Identificar soluciones:
Piensa y nombra las medidas que se pudieran tomar para solucionar el problema descrito.
Realiza una lista.
  1. Predecir posibles consecuencias:
Trata de anticipar por tu conocimiento del problema y del terreno de acción, cuáles serían las consecuencias o los resultados de cada medida tomada.
Realiza un cuadro añadiendo a la lista anterior esta información (en términos de metas o resultados).
  1. Sopesar los resultados:
Examina particularmente las decisiones o las soluciones a la luz de los objetivos y de lo que sientas, valores o creas.
Pregúntate, qué pasará, a quién afectará, a quién perjudicara y cómo, que cuestiones serias pueden surgir (imprevistos) y que yo puedo resolver, cómo reaccionarán los demás, cómo afectará esto a la gente que a mí más me importa, cuáles serán condicionantes externos.
Realiza un cuadro pensando para cada una de las estrategias, señaladas en la lista del punto 3 cuáles son los obstáculos externos y las debilidades internas para que se concreten.
  1. Elegir: Luego de sopesar todo elige la mejor alternativa.
Si cumpliste con cada paso lograste la fundamentación de un proyecto de tutorías y tiene identificado el diagnóstico.
Este momento de diagnóstico asume una importancia fundamental, y de la eficacia con la que se lo realice dependerán los logros que obtengamos en el trabajo a futuro. A través de las actividades y las técnicas que propongamos, estaremos dando respuesta a la problemática vocacional de nuestros alumnos.
7. Los objetivos:      
-Evaluar las características de los destinatarios de las alternativas elegidas en el punto 6.
-Evaluar las posibles estrategias para desarrollar para cada uno de los objetivos (tener en cuenta los 4 momentos del proceso de orientación vocacional, si se trata de un proyecto de estas características)

8. Metodología:
Pensar y analizar diferentes estrategias para llevar a cabo en el proyecto (tener en cuenta los 4 momentos del proceso de orientación vocacional si trata de un proyecto de este tipo)





[1]Ander Egg, Ezequiles y Idañez Aguilar, Maria José. “Guía para Diseñar proyectos sociales y culturales 13° edición, ampliada y revisada. Editorial Lumen, año 1996, Argentina.
[2] Idem cita N° 1
[3] Bohosllavsky, Rodolfo. “orientación Vocacional”, la estrategia clinica. capitulo 2, Ediciones Nueva Visión, 2001 Argentina.

lunes, 13 de mayo de 2013

Encuentro 2


Nombre del curso: “Curso de capacitación de tutorías y orientación vocacional: Orientando a Orientadores” U.N.Q.

Dirección de Tutorías

Encuentro Virtual Número 2 Fecha: 10 de Mayo 2013.-

Profesor: Arias Yamila, Capel Gabriela, Mastrovincenzo Paola y Rodriguez Maria Laura



Tema: - El Primer Momento del proceso de orientación vocacional

Bibliografía: - Ferrari, Lidia. “Cómo elegir una carrera”, capítulo 8, editorial Planeta 1995 Argentina.

- Kielhofner, G. “Modelo de Ocupación Humana”, capítulo 4, 3° edición, editorial Panamericana 2004 Argentina.

- Zenequelli, Eleonora y Acquesta Miguel “La exploración de los intereses y aptitudes”, capítulo IV, Pág. 89 a la 94, editorial Ecua 1984 España.







 Objetivos del encuentro:

- Reflexionar sobre el primer momento del proceso de OV y la elección de los sujetos en la escuela secundaria.

- Brindar herramientas necesarias para elaborar un servicio de orientación vocacional dirigido a estudiantes de ese nivel.



Introducción:

En esta ocasión nos encontramos virtualmente para abordar en profundidad uno de los temas conversados en nuestro encuentro presencial. En esta actividad intentaremos mostrar la importancia del primer momento en la orientación vocacional, proveyendo de otros materiales de lectura que les proponemos trabajar para abordar la temática.

La idea es orientarlos y asesorarlos sobre como armar este primer momento, ya que son muchas las tareas que pueden realizarse. Intentando que ustedes puedan comprender la importancia de la información que podrán obtener de los sujetos de la orientación y como aprovechar al máximo ese material.

Desarrollo:

Continuando con lo conversado en la clase anterior, les proponemos adentrarnos en la importancia de comprender de qué se trata el primer momento en el proceso de orientación vocacional y los aportes que podemos obtener de éste.

Nuestra concepción de orientación no constituye una relación de dependencia en la que el orientador dice al sujeto qué hacer y cómo hacerlo, sino que es un espacio comunicativo a través del cual se crean las condiciones necesarias (situaciones de aprendizaje) para propiciar el descubrimiento o confirmación de las potencialidades del estudiante. De manera que “El” llegue por sí solo a tomar decisiones respecto a su vida profesional con las cuales se sienta comprometido y responsable.

Este primer momento es de gran importancia porque es el de presentación de las personas que consultan, de cómo y qué se va a trabajar durante los encuentros. Es aquí donde se plantean los ejes temáticos que se van a abordar. Entre estos se encuentran: finalización de la escuela secundaria; pasaje del mundo adolescente al mundo adulto (fantasías, temores y mitos frente a esto); el significado de la elección de estudios u ocupación al finalizar la escuela (qué se elige, quién elige, para qué, mandatos, dependencia y autonomía, etc.). Todos estos temas con el fin de comprender la importancia de integrar los aspectos relacionados con las intenciones futuras sobre estudio o trabajo en un “proyecto de vida”.

Hay que destacar que se debe pensar en la elección como proceso, y no en un acto acabado. Es una búsqueda que implica un transcurso en el tiempo, donde cada cual será el protagonista y autor de esta “historia”. Consideremos que cuanto mayor sea su protagonismo en la propia elección, esta será mejor.

En este primer momento se debe valorar la importancia de que cada sujeto reconozca las características personales, pensadas como habilidades, intereses, gustos, así como sus necesidades. Hace falta favorecer el esclarecimiento de los contextos de elección en cuanto a su importancia e influencia, así como las representaciones sobre oportunidades de estudio. El contexto social puede ofrecer oportunidades o por el contrario, obstaculizar e impedirlas. Es sabido que las condiciones en las que se nace pudieran ser determinantes del itinerario de vida, por lo que hace falta mostrar que esto puede ser modificado aunque parezca inevitable.

Es necesario estimular al consultante para que reflexione ordenadamente, lo cual le permitirá analizar sus propios dilemas. Como señala Gullco: “Este es a la vez un lugar narcisista, donde esta permitido mirarse con cariño” .

Hace falta que el alumno tome conciencia de que, para poder elegir, no solo tiene que conocer la oferta académica o laboral vigente, los cursos, sino que sin quitarle importancia a lo anterior, se debe realizar una retrospección. Mirarse hacia adentro y conocerse o mejor dicho reconocerse. Al acercarse los jóvenes manifiestan que saben como son, pero al comenzar a realizar las distintas actividades y técnicas, se entusiasman y reconocen que hay características en ellos que no conocían. Es más, muchas veces vienen pensando en una carrera porque creen que es para ellos, y luego se dan cuenta de que no cumple con todas las condiciones para realizar esa profesión pudiendo después tomar otra decisión.

Es necesario que quien consulta encuentre una motivación personal. Muchas veces el deseo de estudiar y seguir una carrera es de un “Otro importante” (pudiendo ser los padres, docentes, amigos). De este modo la toma de decisión es mucho más difícil por lo cual al joven/adulto le resulta complejo pensar en un futuro propio.

Cada persona tiene la necesidad de encontrarse y ser eficaz en la interacción con el mundo. De este modo surgen pensamientos y sentimientos que se relacionan con tres aspectos fundamentales:

 Sentido de eficacia o de capacidad personal

 Importancia o valor que se da a lo que uno hace (intereses)

 Satisfacción que uno experimenta al hacer las cosas.

Estos tres aspectos responden a la necesidad de cada persona de hacer las cosas que valora, de sentirse competente para hacerlas y encontrar satisfacción en estas.

La motivación se manifiesta a través de dos componentes:

 Afectivo o motivación intrínseca: motivo interno, energía fisiológica.

 Cognitivo o motivación extrínseca: Adquiridas por la experiencia y la intervención de un otro, valores e intereses.

Es indispensable que el sujeto descubra cuáles son sus intereses, qué cosas le gustan, qué cosas realizaría y cuales no. Esto se refiere a lo que uno disfruta o le produce satisfacción hacer. En consecuencia, Lidia Ferrari dice:“…nuestros intereses se nutren de todas las influencias recibidas a lo largo de la vida.”

Resumiendo debemos tomar al sujeto de la orientación como un ser integral diferente de otros, y con características particulares, resultante de una historia que lo conforma y lo hace único. Tuviésemos que tener en cuenta en cada caso el entorno en el que está inmerso este sujeto. Como dice Ines Cappellaci " las elecciones que se van realizando a lo largo de la vida están influenciadas por un conjunto de condicionantes: la clase social, el género, la familia, los pares y los grupos de pertenencia, la cultura, los medios de comunicación, y la publicidad. Es por ello que el trabajo a desarrollar se centra en el proceso de toma de decisiones, que se inicia al finalizar este ciclo educativo y que continuará con el resto de la vida. Entonces, recuperar la construcción subjetiva e histórica de la identidad y comprender los “condicionantes” que se presentan en las elecciones, permitirá ampliar las posibilidades y los espacio de futuros desempeño.”

Consideramos que esto último tiene que estar muy claro y presente en nuestro discurso para que cada uno pueda tomar decisiones sobre qué quiere hacer, qué quiere cambiar y pueda darse la oportunidad, en función de su historia, de las múltiples determinaciones de la estructura inconciente, a partir de su inserción en el tiempo y en el lugar en el que está inmerso.

Para ampliar todos estos temas, sugerimos ahondar en la bibliografía citada.

Propuesta de trabajo

Teniendo en cuenta los contenidos abordados en la clase presencial los invitamos a llevar a cabo una actividad que les permita vivenciar uno de los momentos del proceso de orientación vocacional.

Esta actividad, denominada Autorretrato es utilizada muchas veces, como elemento diagnóstico, y sus autores son Guillermo Magrassi y Manuel Roca. Esta es una técnica autodescriptiva que supone una comunicación verbal, que la persona emite para informar acerca de sí misma. Relatar la historia de la propia vida, implica rescatar momentos significativos, vivencias, logros, fracasos, situaciones de cambio y el registro del paso del tiempo y del crecimiento personal. Este es uno de los objetivos de la actividad del Autorretrato.

Antes de que cada uno de ustedes la complete, les contamos algunas características de esta evaluación.

OBJETIVOS:

-Evaluar las posibilidades expresivas de la persona.

-Evaluar las habilidades de cada persona para autoevaluarse y describirse ante otros.



CONSIGNA: “Responde a cada una de estas preguntas con tus palabras”. Es importante mencionar que es fundamental para llevar a cabo esta actividad ser sincero y autocrítico.

ADMINISTRACIÓN:

Es individual. Algunos orientadores la utilizan grupalmente, después de un tiempo de trabajo en grupo y cuando hay suficiente confianza para compartirla. Su elaboración es requerida de un encuentro para el siguiente, de manera que la persona lo pueda completar sin presiones de tiempo.

En un segundo momento se reflexiona sobre la tarea realizada. Aquí el orientador decidirá si comparte entre todos las reflexiones, o solo aquellos que lo deseen. Otra de las opciones es que se entregue el relato escrito al orientador, el cual será analizado de manera individual. Se deberá tener en cuenta varias cuestiones, entre ellas:

• Cómo la confeccionó

• El tiempo que le dedicó

• Qué seleccionó y por qué

• A quiénes incluyó (identificaciones positivas o negativas)

• Cómo se ve a sí mismo

• Su interacción con el otro



Algunas de las respuestas que solemos encontrar son: “...y ahora estoy aquí sin saber qué hacer... En este momento estoy más perdido o inseguro que cuando... Y ahora estoy esperando... Terminando la escuela y sin saber...”.

El orientador durante la lectura del autorretrato puede hacerle preguntas, observar agregados, pedirle aclaraciones, detectar las omisiones pero, no detenerse exclusivamente en ellas. Se señalan aspectos vinculados a lo actual, a la búsqueda de proyecto, a las identificaciones. Nunca se emiten juicios valorativos.

Ahora los invitamos a cada uno:

• Como primera actividad completar su autorretrato y traerlo para el próximo encuentro impreso.

• Y luego al finalizar responder las preguntas, a modo de reflexión.

AUTORRETRATO

(Guillermo Magrassi y Manuel Roca)

Realizar un relato escrito que incluya:

*Mi descripción física y psicológica.

*Descripción de mi familia y de las relaciones de cada integrante de la misma.

*¿Cuáles han sido mis experiencias más significativas?

*Mi relación con los demás: amigos, compañeros, novio/ novia, pareja.

*¿Cuáles son para mi las cosas más importantes en la vida?

*¿Cuáles son mis principales virtudes?

*¿Y mis defectos?

*¿Qué me gusta de mí?

*¿Qué no me gusta de mí?

*¿Qué desearía cambiar en mi vida?

*¿Qué me gustaría lograr en mi vida?

*¿Cómo haría para lograrlo?

*¿Cuáles son las cosas que más me gustan?

*¿En qué actividades me siento hábil?

*¿En qué me gustaría trabajar en el futuro si pudiera?



Según los textos dados, la clase presencial y la experiencia vivenciada con esta actividad, reflexionen y fundamenten sobre:

a) ¿Por qué esta actividad responde al primer momento?

b) ¿Podría aplicarse esta técnica en otro momento del proceso? ¿Cuál y por qué?

c) ¿Qué puntos sacaría o agregaría al listado que allí no se encuentran?

[1] Gullco Adriana y Gloria di Paola, “Orientación Vocacional, una estrategia preventiva.”. Pág. 31, Ed. Vocación 1992 Argentina.
[2] Lidia Ferrari, “Como elegir una carrera”. Pág. 140, Ed. Planeta 1995 Argentina.

sábado, 4 de mayo de 2013

Encuentro 1


U.N.Q. Dirección de Tutorías
Nombre del curso:
“Curso de capacitación de tutorías y orientación vocacional: Orientando a Orientadores”
Encuentro Virtual Número 1
Fecha:
     4 de mayo de 2013.-
Profesor:
Silvina Ana Santin


Tema:
Los enfoques.
Los  roles del tutor. Ejes conceptuales y tareas del tutor.
El tutor en el acompañamiento a las trayectorias escolares. El tutor colaborador con el equipo docente de un grupo. El tutor colaborador con la función tutora en la escuela.
Bibliografía:
-Patricia Viel “Gestión de la tutoría escolar” Capítulo1, 2 Noveduc., Bs. As. 2009.
-Satulovsky y Silvina Theuler “Tutorías un modelo para armar y desarmar”.Cap. 6., Noveduc, Bs. As. 2009

/  Objetivos del encuentro:

-Brindar herramientas conceptuales para una definición del rol tutorial.

/  Presentación:

Bienvenidos y bienvenidas al curso de capacitación en tutorías y orientación vocacional: Orientando a Orientadores” ….!

En este encuentro encontrarán un recorrido sobre los materiales de lectura que les proponemos trabajar para abordar la cuestión de cómo gestionar un proyecto de tutoría en la escuela.
“No es ni un decálogo ni una receta” acerca de los modos en que creemos que se puede desarrollar esta tarea, puesto que la misma es siempre impredecible, novedosa, ambigua, aunque también puede resultar confusa, vaga y conflictiva en los contextos institucionales en los que trabajamos, pero no por eso es “(im)posible” planificarla y finalmente ejecutarla.

/  Introducción:

Nos proponemos compartir con ustedes algunas de nuestras preocupaciones sobre cómo se vinculan nuestros alumnos con la escuela, la temática del abandono, la situación de los alumnos frente al estudio y frente al propio deseo o no de seguir estudiando.

Entendemos que hoy resulta imposible separar el mundo de la vida del mundo de la escuela.  Pero  es probable que en las condiciones que se produce la enseñanza hoy  surjan tensiones entre la integración de los adolescentes a su “grupo de iguales”, su relación con el grupo de docentes y su integración a las normas escolares y universitarias. Cuando la distancia entre la cultura social incorporada por los jóvenes y la cultura escolar-curricular es grande, el conflicto es un fenómeno muy probable en la experiencia escolar.

Esta constituirá la problemática básica a abordar, desde el curso de tutorías y orientación vocacional, ya que creemos forma parte de un conjunto de estrategias que pueden utilizar los docentes tendientes a lograr cambios significativos en torno a pensar la posibilidad de un proyecto de vida de los jóvenes que supere las visiones inmediatistas.

En estos encuentros, intentaremos por un lado instalar la preocupación sobre la generación de proyectos de vida y orientación vocacional en las escuelas medias y por otro lado, brindar competencias específicas e introductorias para el desarrollo profesional en esta área.

Bueno si me siguen, aquí vamos…!

/  Desarrollo:

Los Enfoques
Se pueden estructurar en la escuela tres tipos de acciones tutoriales, dependiendo de:
*La actitud de los alumnos:
- Concepción pasiva: exige la imposición exterior de normas,  suprimiendo cualquier efecto indeseado,  estimulando a las formas apropiadas de conducta.
- Concepción laissez-faire: básicamente el rol de tutor como orientador o guía no existe, el tutor deja que los chicos hagan.
- Concepción activa: el autodesarrollo debe ser acompañado con el acuerdo de ciertas reglas de convivencia interna básicas, diseñadas mediante la guía de un adulto.
*En relación con la actitud del docente encontramos dos enfoques del trabajo de Tutoría:
-Reactivo, se trabajar sobre el emergente, sobre el problema.
-Proactivo, es el que propone nuevas actividades, promueve el surgimiento de espacios para estrategias.  Este se realiza mediante una escucha preventiva, de anticipación.
*Por último en relación con el ámbito de acción podemos determinar un:
-Ámbito psicosocial: refiere a la relación que el tutor tiene con cada alumno en el plano individual, esto es la historia previa del alumno, y la posibilidad que tiene el tutor de estructurar el propio conocimiento de si mismo.
-Ámbito sociodinámico: refiere a la relación entre el tutor y el grupo. Supone un conocimiento de las dinámicas internas de los grupos de aprendizaje de acuerdo a los cambios que se producen en las trayectorias escolares.
-Ámbito curricular-institucional: refiere a la identificación de prioridades pedagógicas, la dinámica y el seguimiento de procesos de aprendizaje coordinados específicamente.


Por este tema consultar  Capítulo 2 Patricia Viel “Gestión de la tutoría escolar “ Noveduc., Bs. As. 2009.

 
 





Los  roles del tutor. Ejes conceptuales y tareas del tutor.
La designación de la figura del tutor responde a la intención de personalizar y dar sistematicidad a los procesos educativos.
Algunos aspectos de la función docente reclaman de modo particular la acción específicamente tutorial: no sólo la coordinación del proceso evaluador de los alumnos, sino principalmente la adecuación de la oferta educativa a sus necesidades para proceder a las oportunas adaptaciones curriculares y, en general, a la detección y atención de las necesidades de apoyo de algunos alumnos en determinados momentos de su escolarización o a lo largo de toda ella. El tutor además, como un adulto, está llamado a funciones mediadoras en las relaciones dentro del espacio educativo, así como también en las relaciones con las familias de los alumnos y con el entorno.



Por el tema de la responsabilidad de los adultos consultar Cap. 1 de Gestión de la tutoría escolar de Patricia Viel Noveduc., 2009.
 




Siguiendo las palabras de Débora Kantor, se constituye referente para el abordaje de los problemas. Un espacio desde el cual optimizar la acción de las personas y dispositivos institucionales disponibles, y generar nuevas alternativas cuando sea necesario y posible.[1]
Constituirse como referente implicará ser reconocido como un adulto con autoridad y con posibilidades de orientar, guiar, ayudar a”otros”.
De acuerdo a lo que diversos autores plantean la definición del rol del tutor dependerá en principio de la construcción imaginaria que cada quien haga de su propio lugar, pero también se encuentra en intima dependencia de las intersecciones de ese rol con otros roles adultos en la escuela y de la definición que de ese rol realicen los demás actores.
Es de enorme importancia destacar que el tutor forma parte de un equipo docente.  Resulta más que evidente que es necesaria la conformación de un colectivo que sostenga las acciones y donde se represente un ámbito  de discusión y consenso. “Un equipo confiable que desarrolla un marco donde revisar y dimensionar las prácticas, para pensar que fue valioso y que mecanismos se pusieron en juego para que el proyecto resultara significativo, que cuestiones no aparecieron con la claridad necesaria y adoptar nuevas líneas de definición e implementación”[2].
Las funciones y tareas generales que se encomiendan al tutor tienen tres diferentes tipos de destinatarios: ante todo, el alumnado, pero también el profesorado y las familias.
Hemos discurrido acerca de la acción tutorial sobre el alumnado y en breve nos referiremos sobre la acción hacia el propio profesorado, pero en este caso haremos una referencia a la relación con las familias. Al decir de algunos autores, el encuentro con las familias se articula mediante un tiempo/espacio, como analizador en el dispositivo institucional (Fernández L, 1998:34).



 
 





Abrir el espacio/tiempo de la posibilidad que las familias se comprometan con el propio proyecto de la escuela, creando condiciones para el disenso, la crítica y la construcción conjunta no es un tema menor.
Todas esas funciones, a su vez, pueden desarrollarse en diferentes tipos de actividades.  El acierto en la elección de esas actividades dependerá de su adecuación a las circunstancias reales de los alumnos y del medio institucional en que se desarrolla la función tutorial en la escuela.
Las funciones podrán desarrollarse atendiendo a distintas actividades, y es responsabilidad del tutor elegir, programar y realizar las actividades que le parezcan más oportunas para sus alumnos, de acuerdo a un tiempo y lugar.
Es preciso que el tutor planifique las actividades específicamente que va a desarrollar a lo largo del curso. Esa planificación ha de plasmarse en una programación semejante a otras programaciones docentes: con libertad y bajo su responsabilidad, pero en el marco de un Proyecto coordinado.
La responsabilidad de programar la acción tutorial ha de hacerse en el marco de objetivos educativos comunes. Ello supone no sólo que su trabajo sea reconocido, apoyado e incentivado, sino también que toda la comunidad educativa participe en la concreción del modelo de acción tutorial y se implique en su desarrollo con diferentes niveles de responsabilidad. Con ello, el tutor no estará solo en su tarea, e integrará sus acciones en un tratamiento educativo más amplio donde obtiene respaldo institucional y, en consecuencia, puede alcanzar mayor eficacia.
El tutor y  el equipo docente:
El trabajo tutorial en equipos de estudiantes, se encuentra de la mano con otra acción que está vinculada con la acción del equipo desde la docencia.
El espacio tutorial debería propiciar espacios donde intercambiar formas de trabajo, problemas y soluciones encontradas, materiales utilizados, evaluaciones sobre la marcha de los cursos, etc., con el mismo equipo docente. Para ello se pueden establecer foros o listas de correo y encuentros presenciales periódicos. Una forma particular de vinculación resulta ser el aula de tutoría, en la que los tutores de un mismo curso o de otros cursos, y los equipos docentes trabajan atendiendo las demandas de sus grupos, a través de la web y el uso de la computadora.
De dichos intercambios formales y no formales o informales, se pueden resolver colectivamente algunos de los problemas comunes que se van presentando en la vida del aula.
Estos espacios resultan además de utilidad para la formación es servicio, para el desarrollo de actividades específicas de formación complementaria (uso de herramientas específicas para el trabajo distancia, manejo de nuevas tecnologías, etc).
El tutor y las trayectorias escolares: En virtud de las condiciones en que se desarrolla la escolaridad, la función del tutor se requiere pensar como parte de los proyectos institucionales que las escuelas diseñan para fortalecer las trayectorias escolares de los estudiantes, favoreciendo la reinserción escolar, la promoción de la terminalidad, y la constitución del espacio escolar como un lugar de aprendizaje continuo a lo largo de la vida. Esto es para que la escuela obligatoria no constituya para la mayoría de los alumnos al el último escalón de sus procesos de aprendizajes.
La función de tutoría en este marco se desarrolla alrededor de la tensión entre la atención colectiva de los estudiantes y los requerimientos de atención individualizada, demanda continua realizada al tutor. En concordancia con lo señalado, esta propuesta parte de revisar conceptos que se consideran fundantes, tales como el derecho a la educación, la concepción de los adolescentes, jóvenes y adultos como sujetos de derecho; el lugar de la escuela y de los agentes estatales como garantes del derecho a la educación; el acercamiento de las culturas juveniles a las culturas de los adultos, la importancia del trabajo como resultado del propio esfuerzo, etc.
El tutor en la escuela: Por ultimo las tutorías sirven a la escuela, a los fines de establecer una comunicación fluida entre los diferentes estamentos y grupos, tanto formales como informales.
En este sentido resuelve problemas, mejora las relaciones interpersonales, contribuyendo a la conformación de verdaderos equipos docentes. Para todo esto es necesario que la escuela piense en relación a la tutoría formulando criterios consensuados.

Estado de situación de la Tutoría: problemas no resueltos
Hoy la tarea de tutoría supone una actividad más que está asociada a la dedicación exclusiva de los docentes en la escuela.  Esta cuestión contribuye al compromiso de los actores con los objetivos de la institución. Pero muchas veces observamos que en relación con los problemas que presentan los estudiantes se desarrollan acciones tutoriales de forma asistemática, o "funcional". Por otra parte, que los docentes tutores tengan a su cargo las decisiones y acciones necesarias para el desarrollo tanto del propio espacio tutorial, como de la articulación de criterios y actividades con otros espacios tutoriales, puede que no  contribuya la unidad de sentido que se requiere en todo programa institucional de tutoría.
Otra cuestión que dificulta el desarrollo de una visión es que los tutores constantemente reinterpretan los objetivos perseguidos, hacen apreciaciones de las situaciones enfrentadas, estructuran problemas, generan alternativas y redefinen las prioridades fijadas en los objetivos propuestos. Estos comportamientos no sólo alteran los cursos de acción definidos por el diseño sino que también modifican el contexto de operación entablando alianzas, fortaleciendo a algunos actores sociales y no a otros, generando expectativas y demandas y creando una imagen  de las acciones del programa, que muchas veces no coincide con las del programa.
Entonces, los resultados alcanzados pueden diferir notablemente de los planteados en los objetivos explícitos, las consecuencias no deseadas escapar al control de los participantes y la incertidumbre sobre los impactos desbordar las capacidades.
Por todo lo planteado lo más conveniente resulta que cualquier acción tutorial, se desprenda de los objetivos del propio proyecto educativo institucional.

/  Propuestas para la lectura:

En relación a las lecturas recomendadas para esta clase encontrarán que el texto de Patricia Viel, de la referencia bibliográfica,  “Proyectos y recursos para la escuela secundaria: Ejes de contenidos y tareas del tutor” nos narra la función de tutoría en la escuela secundaria, como una tarea colaborativa de los docentes, hacia los docentes, la propia institución pero fundamentalmente para los alumnos. “En el contexto contemporáneo, y ante la compleja situación de fragmentación de las escuelas secundarias, la tutoría surge como una estrategia potente que articula recursos para acompañar las trayectorias escolares de los jóvenes.
Una mirada estratégica de la gestión de la tutoría demanda la señalización de posibles caminos para construir sentidos, condiciones y acciones que permitan su desarrollo con una perspectiva institucional. Con fuerte acento en el qué, y el para qué, se proponen variados cómo?, con la convicción de que es posible una escuela diferente.
Este volumen es un aporte para las escuelas que desean integrar el proyecto de tutorías como una línea de mejora a su proyecto institucional y para las que desean revisar las acciones realizadas”.
Entre sus Contenidos, encontramos en la Primera parte, en el capítulo 1: el tema de la responsabilidad de los adultos. Luego abordaremos la “pregunta sobre los sentidos” de la tutoría escolar. Entre los conceptos fundamentales que aborda el Capítulo 2, y pretendemos ustedes analicen se presenta: los sentidos de la tutoría en la escuela secundaria, las dimensiones y los logros, el proyecto del equipo y la coordinación, y finalmente la tutoría como proyecto institucional como una responsabilidad compartida sobre la que volveremos en el módulo 4 de este curso.
En síntesis, esperamos que con esta lectura podamos introducirnos en la temática de la tutoría, el rol del equipo de tutores en la escuela, la tutoría como responsabilidad de la escuela y de las políticas educativas
Por otra parte el texto titulado “Tutorías: un modelo para armar y desarmar”,  nos propone abordar la cuestión de la tutoría en los primeros años de la escuela secundaria, pero no por eso deja de brindar pistas acerca de cómo enfrentar la problemática que pretende desarrollar este curso, la vinculación particular de la tutorías con los alumnos del ultimo año de dicho nivel.
El texto de Silvia Satulovsky y Silvina Theuler recoge “las voces de los actores a través de preguntas, ideas y categorías desplegadas para imaginar un nuevo sujeto joven, que interpela a los adultos mientras padece las formas fragmentadas, estereotipadas y cristalizadas de las instituciones educativas”.
Fracturas, grietas, angustias y un enorme vacío simbólico cuestionan el sentido de las prácticas educativas sin encontrar respuestas desde las lógicas disciplinarias del control y la sanción. Una suerte de darwinismo educativo, en donde sobrevive el más apto y queda afuera el que no puede, carcome gran parte de la matrícula en los primeros años de la escuela media. Este dato no es sólo una proporción fría, son alumnos con nombres, historias y rostros, que quedan fuera de la escuela y del derecho a la educación. Las cifras maquillan el sentimiento de frustración, fracaso y desamparo de los jóvenes y de la escuela toda.
Este libro-experiencia se fue construyendo en espacios de formación con colectivos de escuelas secundarias y medias de diversas localidades argentinas y mexicanas, conformados por supervisores, equipos técnicos, directores, profesores y preceptores que se sintieron desafiados por el ejercicio de la función tutorial.
La lectura solicitada para este encuentro, Capítulo 6, aborda la cuestión del trabajo con las familias y para ello considera en la función tutorial una serie de actividades para poder integrarlas al trabajo colectivo institucional.




[1] Kantor, Débora (2008): "Variaciones para educar adolescentes y jóvenes". Buenos Aires: del Estante Editorial.
[2] Satulovsky y Silvina Theuler “Tutorías un modelo para armar y desarmar”. Pag. 84. Buenos Aires, Noveduc, 2009

/  A modo de disparador.

Este es tutoris  una especie de super tutor, resulta de una ilusión, un imposible…
Qué le sacaríamos y por qué…
  se animan a dibujar el propio?










Espero les haya gustado tanto como a mi, compartir este espacio con ustedes.
Saludos! Silvina



[1] Kantor, Débora (2008): "Variaciones para educar adolescentes y jóvenes". Buenos Aires: del Estante Editorial.
[2] Satulovsky y Silvina Theuler “Tutorías un modelo para armar y desarmar”. Pag. 84. Buenos Aires, Noveduc, 2009